viernes, 13 de noviembre de 2015

La Euroliga se encierra en sí misma y cambia el formato de la Eurocup

La modificación de la máxima competición continental para la próxima temporada afectará también al sistema de competición de su hermana pequeña.

Foto : MD

FERRAN ANDRÈS I @ferranandres
El acuerdo alcanzado el miércoles entre IMG y Euroliga cambia por completo el panorama baloncestístico europeo para las próximas temporadas. En pleno enquistamiento de las negociaciones entre Euroliga y FIBA para realizar conjuntamente una copa de Europa más atractiva y económicamente más rentable, la organización presidida por Jordi Bertomeu llegaba a un acuerdo, con el beneplácito de los clubes más influyentes del continente, con la empresa  británica de representación IMG por 10 años y 16 millones de euros anuales. El nuevo acuerdo supone cerrar aún más la competición, que a partir de la temporada 2016 -1017 contará con sólo 16 equipos y 30 partidos en la primera fase, jugando todos contra todos. Los 8 mejores de la primera fase disputarán de nuevo una liguilla de la que saldrán los 4 equipos que disputen la final Four.

De estas 16 plazas, 11 son fijas para los equipos con Licencia A ( Real Madrid, FC Barcelona, Baskonia, Zalguiris, Olympiacos, Maccabi Tel Aviv, Efes Pilsen, Milan, Fenerbahce, Panathinaikos y CSKA perdiendo equipos como Unicaja su licencia. Las 5 restantes, 3 irán a parar a los campeones de la VTB League, Liga Adriática y uno por definir, que podría ser la liga Turca o la ACB. Francisco Roca ya ha pedido una reunión a Jordi Bertomeu para la próxima semana para valorar la situación. En el caso de ser para la española, el ganador sería el mejor clasificado de los no licenciosos (Real Madrid, FC Barcelona y Baskonia).  De las 2 que faltan, una sería para el campeón de la Eurocup y otra para el ganador de la previa de 8 que se disputa a finales de septiembre entre los campeones de las ligas que conforman el segundo escalafón europeo, como la belga. En las bases del acuerdo, Euroliga afirma que se las licencias A se pueden ampliar más allá de los 11 clubes, algo que sólo parece posible si hay entidades capaces de aumentar su presupuesto en las cantidades que Euroliga pudiera aceptar como merecedoras de Licencia A.

El acuerdo es un viejo anhelo del presidente de la Euroliga, Jordi Bertomeu, que lleva años intentando crear una gran liga europea entre los principales clubes del continente en busca de realizar una competición total capaz de disparar los ingresos. De ahí se explican el sistema de licencias, la decisión de jugar los viernes y el último acuerdo, que contempla jugar dos veces por semana, lo que deja muy tocadas a las competiciones nacionales, y que poco a poco se han ido viendo fagocitadas hasta llegar a un punto límite como el actual, en el cuál algunos de los 11 clubes licenciosos se plantean dejar sus ligas, caso de los tres de la liga española. El baile no ha hecho nada más que empezar, y tanto grandes, medianos que quieren consolidarse como grandes como pequeños no quieren perder comba en una situación con tantos frentes e intereses enfrentados. El próximo martes se reúne la comisión delegada de la ACB, formada por Barcelona, Baskonia y Real Madrid por una parte, dos clubes que aspiran año tras año a estar en la Euroliga como son Valencia Basket y Unicaja y dos pequeños, Guipuzkoa y Fuenlabrada. Sobre la mesa los 3  primeros argumentarán sus razones para dejar la liga o replantear la misma, algo que, al encontrarse con varios partidos por semana, pedirían reducir el número de equipos en ACB a 16 a partir de la próxima temporada, enredando aún más la situación, ya que obligaría a resituar el sistema de ascensos y descensos de la competición nacional teniendo en cuenta que Ourense subirá la próxima temporada.

Los principales clubes afectados por este nuevo acuerdo cómo son Bayern de Múnich, Valencia Basket, Unicaja, Khimki o Lokomotiv Kuban se plantean ahora alinearse con la FIBA para crear una segunda máxima competición de clubes que compita con la Euroliga. No sería la primera vez que ocurre una cuestión así. En la temporada 2001 FIBA decidió crear la Suproleague tras perder la batalla con la ULEB por la organización de la Euroliga. 
La Final Four de aquella Suproleague la disputaron nada más y nada menos que Maccabi Tel Aviv, CSKA, Efes o Panathinaikos. Las ventajas de alinearse con la FIBA, según indica el propio organismo, sería ver aumentados los ingresos para los clubes ya que el máximo organismo del basket mundial que ofrece 30 millones a repartir cada año y la potencialidad de disparar esos ingresos al ofrecer el paquete televisivo de selecciones más torneo continental. Además el asentamiento de la FIBA a nivel mundial le permite conseguir sponsors de manera más rápida que Euroliga. El máximo órgano del baloncesto mundial dio el primer paso este verano en su intención de recuperar el control sobre el baloncesto del Viejo Continente con la creación de la FIBA Europe Cup que compite con la Eurocup, a la cuál se pasaron clubes como Telenet Oostende o CEZ Nymburk.

Además a partir de la próxima temporada el sistema de Eurocu también cambia al dejar de existir los descensos con la Euroliga. El formato será como el de la actual Euroliga, una primera fase con 6 equipos, TOP 16, eliminatoria de cuartos y Final Four. Todo patas arriba en el enésimo intento de Jordi Bertomeu y Euroleague por competir con la NBA. Y esto, no ha hecho más que empezar.


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